26.1.12

Los publicistas y los soldados

La sensualidad del mundo nos impide disfrutar de cosas que no son espectaculares a simple vista; tanto ha penetrado la cultura, que aún el cristianismo es victima de esto. La iglesias son sustituidas en algunos casos, con servicios televisados. Los Pastores cada vez más llaman la atenciòn por sus mensajes de prosperidad, victoria y profecias para los paìses.Los televidentes-cristianos buscan llenar sus sentidos con este tipo de predicaciones.



A favor tenemos que de esta forma el evangelio se predica a gran escala, escuchamos a los predicadores hablar de miles, o millones de televidentes que escuchan y ven el mensaje, y aportan ofrendas para que esto continue pasando.



Cada vez se oye menos predicar acerca de la persona de Jesucristo, el arrepentimiento y la salvaciòn. Y se escucha más de lo que El puede hacer por cada persona y lo que las personas tiene que hacer para recibir esos regalos.



He divagado en la idea de, que tanto esta forma de predicar el evangelio permea la cultura del televidente y que otro tanto se queda en el corazòn de los creyentes. Hablando en semillas y tierra, ¿cuanto de esto cae en roca y cuanto en tierra fértil? ¿Será esta la nueva forma de crear iglesias?



Hace unos días nos visito Carla, una gran amiga, que hacia varios años no veiamos. Ella lleva la mitad de su vida como misionera y viviendo en otros paìses. Casada con Andy, se estableciò en el norte de Texas, y ellos mismos financian las misiones que Carla hace por diferentes paìses y ciudades.



Tiene una forma peculiar de narrar sus experiencias, podrias escucharla por horas. La sabiduria y la mente de Cristo se reflejan en sus palabras, y consejos. Como ella dice "estoy en una etapa en la que me siento una mujer de éxito, porque desde muy joven entendí el propósito de Dios para mi vida, y continuo esforzandome y viviendo para ello, no me imagino haciendo nada más"



El propósito de Carla es hablar de Jesús a toda persona que se cruce en su camino, en sus palabras, "muchos taxistas, 3 por día durante mis años de estudiante en la Universidad, escucharon quién es Jesús." Y esa experiencia formo parte de su inversiòn para el reino.



Hoy, viaja por el mundo llevando a las pequeñas iglesias apoyo para que desarrollen sus propios programas evangelisticos, o implementa programas para mujeres, jóvenes y niños. "Les enseño a hacerlo por si mismos y después me voy, no me gusta ser el centro, o que ellos dependan de mi ...los visito despues de algún tiempo programado"



Lo mismo puede iniciar un estudio de la Palabra con un jóven mexicano que se denominada gnóstico, o con una mujer de origen chino que solo quiere aprender el idioma, y ambos convergen en entregar su vida a Cristo.



"Me gusta llevar a mis misiones a personas diferentes, tengo varios equipos que instruyo, que me acompañan en cada una" Ya sea Chiapas, Florencia o Rumania, empaca cada determinado tiempo y va. "Todo lo hago de forma personal, no pido apoyo a las iglesias porque financiar junto con mi esposo las misiones, es nuestra forma de sembrar..."



Esta experiencia me permitiò meditar en lo siguiente; no es el sensacionalismo moderno lo que hace que crezca la verdadera iglesia, es el trabajo de personas como Carla, que a cada paso que da siembra la palabra, no con elocuencia frente a un microfono y promesas de lo que el poder de Dios puede hacer en sus vidas de forma material, si no con la humildad y el celo de hablar de la verdad al alma y espíritu de las personas "No se trata de convencer a la gente de convertirse, sino de que se den centa de que Él existe, porque muchos no saben y cuando alguien les dice, cambia sus vidas"



Hay gente debajo del escenario sembrando la Palabra, hablando de Jesús, la salvaciòn y el perdón. Grandes personas que no estan pidiendo ser reconocidas porque estan viviendo el propósito para el cuál fueron llamados. Son soldados del ejército de Dios, no sus publicistas.



Concluye "todos debemos de hablar de lo que Dios hizo en nuestras vidas, a cada persona que encontremos en nuestro camino".

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